Manteniendo la Integridad Académica en la Educación Online: Recomendaciones clave para universidades

La integridad académica es un pilar fundamental en el mundo educativo. Para que el proceso de aprendizaje sea significativo, debe basarse en valores como la honestidad, la justicia, el respeto por el trabajo de otros así como la responsabilidad. Mantener la integridad académica en los exámenes en línea se ha vuelto un desafío importante en la actualidad debido a la evolución de la educación en línea y a la necesidad de adaptación de los métodos de evaluación tras las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial. Este artículo se enfocará en explorar diversas estrategias que pueden ayudar a garantizar exámenes en línea honestos y transparentes.

¿Por qué es importante la integridad académica en la educación en línea?

La integridad académica es un principio esencial en la comunidad académica que se espera que todos los que forman parte de la comunidad académica respeten. Desde funcionarios académicos y docentes hasta investigadores y estudiantes. La integridad académica significa actuar con los valores de honestidad, confianza, equidad, respeto y responsabilidad en el aprendizaje, la enseñanza y la investigación (EAIP, 2013).

La integridad académica es esencial en la educación en línea por varias razones fundamentales. Garantiza que las titulaciones en línea sean respetadas y valiosas, mantiene el valor del aprendizaje genuino, promueve una competencia justa entre los estudiantes, y preserva la reputación de las instituciones educativas. 

El actuar con integridad durante su formación prepara a los estudiantes para la vida y la carrera profesional, fomenta la ética y la responsabilidad ciudadana, y asegura la viabilidad continua de la educación en línea a medida que esta modalidad educativa evoluciona.

 

Recomendaciones clave para mantener la Integridad Académica en la Educación Online

En la educación en línea, los exámenes presentan desafíos únicos para mantener la integridad académica debido a su naturaleza remota. La falta de supervisión presencial hace que los docentes tengan limitaciones en cuanto a la autenticación y verificación de los examinados. Aquí se presentan algunas estrategias efectivas para prevenir trampas en exámenes en línea:

1. Definir claramente qué es lo que se considera una falta a la integridad académica

Si bien muchos estudiantes pueden estar al tanto de las técnicas de trampa y las nuevas herramientas de Inteligencia Artificial Generativa como ChatGPT, es importante establecer claramente qué acciones se consideran una trampa y cuáles son las expectativas de integridad académica. Los docentes deben transmitir a los estudiantes de forma efectiva las consecuencias de cometer faltas durante una evaluación en línea, enfatizando que es una falta al código de conducta estudiantil, así mismo debe presentar claramente las sanciones a las que una persona que actúa sin integridad se hace acreedora.

2. Mantener actualizadas las políticas de integridad académica

Para que los esfuerzos por frenar las faltas cometidas durante los exámenes en la línea estén sustentadas en una base institucional, es importante integrar lineamientos y mantener actualizadas las políticas referentes a la integridad académica, esto le permitirá recordar a los estudiantes qué es lo que se consideran faltas graves al código de conducta.

3. Implementar diferentes tipos de evaluación

Es fundamental variar el tipo de preguntas de exámenes de ciclos anteriores a la implementación de una herramienta de supervisión remota, ya que los estudiantes pudieron haber compartido las preguntas y respuestas. Una práctica idónea es crear múltiples versiones de exámenes, mezclar secuencias de preguntas, asignarlas de forma aleatoria y considerar incluir preguntas de ensayo y respuestas explicativas.

4. Ofrecer pruebas de baja complejidad, pero más frecuentes

En lugar de exámenes complejos, se pueden asignar pruebas de baja complejidad que no incentiven a los estudiantes a cometer faltas o copiar, pero que permitan evaluar su desempeño. Es ideal incrementar la cantidad de este tipo de pruebas de baja complejidad para fomentar la cultura de repaso y aprobación dentro del proceso de enseñanza – aprendizaje.

5. Implementar exámenes supervisados

La supervisión remota y automatizada es una de las formas más efectivas de garantizar la autenticidad de los estudiantes durante los exámenes en línea. Actualmente, existen soluciones de software de supervisión en línea como Proctorizer que permiten validar y autenticar a los estudiantes, registrar el comportamiento durante las sesiones de prueba, detectar señales de trampa.

Además, bloquear las funcionalidades en el navegador y en el equipo de cómputo desde el que se realiza el examen evita que los examinados accedan a sitios web o aplicaciones externas, lo que disminuye las oportunidades de que el estudiante cometa algún tipo de falta o ponga en riesgo el banco de preguntas.

6. Cree un proceso orientado a reducir la ansiedad de los estudiantes

Reducir la ansiedad de los estudiantes antes de un examen en línea es esencial para garantizar tanto la adopción tecnológica, como un ambiente de evaluación más equitativo. Una estrategia efectiva es proporcionar a los estudiantes un entorno de prueba en línea en el que puedan realizar un examen de prueba que les permita verificar su conexión, el acceso y validación correctos, el adecuado uso de cámaras web y del equipo antes del examen real.

Hemos comprobado que este proceso de prueba previa no solo ayuda a los estudiantes sentirse más cómodos, seguros y confiados sino que también les brinda la oportunidad de familiarizarse con la plataforma de supervisión, conocer de primera mano el proceso y solucionar problemas técnicos antes de que afecten su rendimiento el día del examen. Esto también mejora la seguridad de los estudiantes, quienes están más preparados y concentrados para rendir examen, ya que no tienen preocupaciones técnicas que puedan distraerlos.

7. Asignar actividades de aprendizaje colaborativo

Fomentar la colaboración entre los estudiantes a través de plataformas interactivas es una estrategia poderosa que promueve una cultura de cooperación y ayuda a prevenir posibles faltas. Una buena iniciativa es asignar proyectos grupales en los que los estudiantes deban trabajar juntos en tiempo real a través de herramientas de videoconferencias, redes sociales o documentos compartidos. Esto hace que los estudiantes sean coautores de sus aprendizajes, lo que disminuye la tentación de recurrir a prácticas no permitidas.

8. Analizar los reportes de supervisión para identificar tendencias

Los reportes de supervisión son un activo muy valioso que permite identificar acciones y posibles faltas. Los responsables de las universidades pueden analizar la información recopilada para detectar patrones y tendencias de comportamiento que podrían indicar deshonestidad académica. Por ejemplo, si un reporte de supervisión revela que un grupo de estudiantes siempre inicia sus exámenes al mismo tiempo y responde de manera idéntica, esto podría ser una señal de trampa.

Al analizar la información de forma regular, las instituciones y sus docentes pueden definir qué medidas es necesario implementar para hacer valer las políticas de evaluación y prevenir acciones similares en el futuro, lo que mejora continuamente la integridad de los exámenes en línea.

Como las universidades promueven la Integridad Académica

Las universidades están tomando medidas concretas para garantizar la integridad académica. Algunas de las estrategias que implementan incluyen:

1. Firma del código de honor

La firma del código de honor es una de las estrategias más comunes para promover la integridad académica en las universidades. Al hacer que los estudiantes lean y firmen este código, se les recuerda de manera explícita la importancia de la honestidad en el proceso educativo. Esto no solo establece expectativas claras de comportamiento ético, sino que también refuerza la responsabilidad personal de los estudiantes en el mantenimiento de la integridad académica.

Un ejemplo concreto de esto sería una universidad que requiere que los estudiantes firmen un código de honor antes de cada examen en línea. Al hacerlo, los estudiantes se comprometen a realizar la prueba de manera honesta y a no utilizar recursos no autorizados. Esta medida no solo se enfoca en la firma del código, sino que también implica la confianza mutua entre los estudiantes y la institución educativa.

2. Implementación de diferentes métodos de prueba

Otra estrategia que las universidades están adoptando es la implementación de diversos métodos de prueba. Esto significa que en lugar de depender de exámenes estandarizados, los educadores diseñan evaluaciones que varían en formato y contenido. Al hacerlo, se reduce la posibilidad de que los estudiantes compartan preguntas o respuestas en línea, ya que cada examen es prácticamente único.

Un ejemplo concreto es utilizar una combinación de preguntas de opción múltiple, ensayos y proyectos prácticos como parte de la evaluación de un curso. Al diseñar exámenes de esta manera, se desafía a los estudiantes de diferentes maneras, lo que hace que compartir respuestas sea menos efectivo. Además, al cambiar los exámenes en cada período académico, se evita que los estudiantes tengan acceso a preguntas de exámenes anteriores, lo que disuade las posibilidades de que cometan algún tipo de falta y promueve un ambiente de aprendizaje honesto.

3. Facilitar la implementación de exámenes supervisados

Ya platicamos que la supervisión de exámenes es esencial para garantizar que los estudiantes que toman exámenes en línea sean quienes dicen ser. Las universidades en Latinoamérica y el mundo, ya están adoptando soluciones tecnológicas para llevar a cabo esta supervisión de manera efectiva.

La solución que ofrece Proctorizer incluye el uso de cámara web, software de monitoreo y tecnología de reconocimiento facial basada en IA, que permiten autenticar la identidad de los estudiantes, escanear la habitación para verificar que no se tenga acceso a recursos no permitidos o ayuda externa, monitorear de forma automatizada a cada estudiante, identificar y registrar incidencias durante el examen, y alertar a los administradores de cualquier actividad sospechosa.

Las universidades que ya utilizan Proctorizer para garantizar la autenticidad de los exámenes tienen control del proceso de evaluación virtual en todo momento, además aseguran la identificación facial de sus estudiantes y reciben notificaciones cuando se detecta cualquier conducta sospechosa, como mirar fuera de la pantalla, utilizar dispositivos no permitidos, salirse de la pantalla del examen supervisado o consultar con otras personas en escena. Esto garantiza que los exámenes en línea sean tan seguros como los presenciales.

Nuestro sistema se ha convertido en una herramienta fundamental para más de 80 instituciones y empresas de América Latina a las cuales ayudamos a garantizar la integridad de sus exámenes virtuales sin poner en riesgo la reputación y la seguridad de su información.

¿Le interesa conocer cómo Proctorizer puede ayudar a su institución a crear un entorno seguro y confiable de evaluación? Contáctenos aquí o déjenos sus datos a continuación: